Una buena cama te asegurará un descanso profundo, placentero y reparador

Cómo elegir la cama perfecta

¿Crees que nuestros políticos mejorarían su rendimiento si durmieran mejor?


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Un individuo que duerme un promedio de ocho horas diarias, pasa un tercio de su vida en la cama. Este no es un dato menor, ya que al tomar consciencia de este hecho el proceso de selección de la cama perfecta cobra sentido. La cama deja de ser solo una parte más del mobiliario, para convertirse en un elemento clave del hogar. En este sentido, ¿crees que nuestros políticos descansan lo suficiente para asumir el estrés que provoca su tarea?


En la web de My Healthfinder están expuestos los factores que afectan a la calidad del sueño, incluyendo la cama, y qué hacer para pasar una noche de descanso. Es recomendable seguir sus indicaciones y, al mismo tiempo, tener el mobiliario adecuado.


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Actualmente la oferta de camas es muy amplia. En el mercado hay diversos modelos y cada uno tiene sus particularidades. En este artículo podrás informarte sobre la importancia de elegir una buena cama, qué aspectos debes tener en cuenta para llevar a cabo esa elección y qué tipos de cama existen.


¿Por qué es importante elegir una buena cama?

Es cierto que el costo de producción de los artículos de cama se ha encarecido desde 2013 como se puede ver en Statista, pero se trata de una adquisición duradera. Es por ello que todo lo que tenga que ver con la salud de un buen descanso es una inversión a largo plazo, más que un gasto.


La elección de la cama es muy importante porque de este mueble depende la calidad del sueño. Cabe invertir lo suficiente para tener una cama que cumpla con su función. Una buena cama te asegurará un descanso profundo, placentero y reparador y la energía indispensable para el normal desarrollo de tus tareas diarias.


Dormir bien tiene efectos beneficiosos para el cuerpo y la mente. Cumplir con las horas de sueño necesarias para tu edad y nivel de actividad es la mejor manera de evitar dolencias y padecimientos y tener un buen estado de ánimo por las mañanas.


En cambio, un descanso deficiente puede causarte muchos problemas de salud, tales como molestias musculares y dolores articulares. Se ha comprobado que la falta de sueño también está vinculada con el aumento de peso, las enfermedades cardiológicas y el estrés.


La cama perfecta

Para elegir la cama ideal hay que tener varios aspectos en cuenta. El primero de ellos es el espacio disponible en el ambiente donde se ubicará la cama, ya que de este dependerá el tamaño del mueble. Se estima que alrededor de la cama debe haber un metro libre, para que no haya dificultades de circulación ni se obstaculicen las puertas.


El segundo aspecto es la altura de la o las personas que dormirán allí. Una cama cómoda debe tener una longitud que exceda entre 15 y 20 centímetros la altura de quien la vaya a utilizar. También debe tenerse en cuenta la contextura física, ya que cada modelo tiene un ancho diferente.


El tercero es el precio. Cada familia cuenta con un presupuesto específico para la compra del mobiliario, y este condiciona sus elecciones. Una vez establecida la cantidad que va a destinarse a la adquisición de la cama, las opciones se acortarán.


El cuarto y último aspecto a tener en cuenta es la funcionalidad de la cama. Se debe decidir si se elegirá un mueble que cumpla solo con la función básica de ser un lugar de descanso, o si se seleccionará uno que cumpla una doble función. Hay muchas camas que poseen un espacio de almacenamiento, cajones, escritorio o incluso un carro con una cama extra debajo.


¿Qué tipos de cama existen?

Existen muchos tipos de camas, dependiendo de la característica de referencia que se tome en cuenta. Los criterios de clasificación más comunes son los siguientes:


Tamaño

Las camas según su tamaño pueden dividirse en dos grandes grupos: individuales y matrimoniales. Las individuales pueden ser de una plaza o de una plaza y media, mientras que las matrimoniales son de dos plazas. Hay dos tipos de camas matrimoniales especiales, que son más grandes. La Queen size, que tiene un ancho de 1.80 por un largo de 2 metros, y la King size, que es de 2 x 2 metros.


Material

Las camas, conforme a su material, pueden ser de madera o metal. La madera es un material noble, muy durable, que aporta calidez al ambiente. Por otro lado, el metal en todas sus versiones da un aspecto más moderno. Si bien aún existen camas de hierro, actualmente es más común encontrar muebles de aluminio, ya que es un metal más económico.


Diseño

Los adultos suelen elegir entre dos diseños de cama: tradicionales o industriales. Las camas tradicionales son las protagonistas de la habitación. Se caracterizan por una estructura de madera robusta, un cabezal vistoso y un soporte para pies. Por el contrario, las camas industriales son muebles sencillos y funcionales, que solo actúan como soporte del colchón. Son ideales para las personas que llevan un estilo de vida minimalista.


Para las habitaciones donde conviven varios niños generalmente se utilizan las clásicas camas marineras, que se ubican una encima de la otra y ocupan muy poco espacio. Si en el dormitorio descansa solo un niño, es preferible comprar una cama con cajones, ya que pueden usarse como armario o zapateros.


La cama perfecta debe ser complementada con un colchón de calidad, una almohada ergonómica y sábanas de algodón, para lograr un óptimo descanso. Cuando adquieras la cama consulta con el asesor de ventas si dispone de estos productos, ya que suele ser más económico comprar el pack completo.