Consiguieron hasta mayo 86 millones de los más de 2.500 que esperan ingresar este año

Los planes de desinversión autonómicos solo recaudan un 3% de lo previsto

Las comunidades autónomas han recurrido a poner el cartel de “Se vende” a casi todas sus propiedades para cuadrar sus cuentas. Coches, edificios, solares… todo vale para conseguir unos millones de euros que permitan ajustar menos el gasto.

|

Euros
La previsión era recuadar 2.568 millones de euros este año.
Las comunidades autónomas han recurrido a poner el cartel de “Se vende” a casi todas sus propiedades para cuadrar sus cuentas. Coches, edificios, solares… todo vale para conseguir unos millones de euros que permitan ajustar menos el gasto. Por esta vía, la de las desinversiones, los gobiernos autonómicos tenían previsto recaudar nada menos que 2.568 millones, más que, por ejemplo, lo que esperan obtener con la recuperación del Impuesto de Patrimonio.

Pero, por el momento, la realidad queda a años luz de esta cifra. En los cinco primeros meses del año, los gobiernos regionales apenas han obtenido 86,4 millones de euros con la venta de activos, según los datos del Ministerio de Hacienda. Es decir, sólo han recaudado el 3,37 por ciento de lo previsto para todo el año, cuando lo “normal” sería haber conseguido en torno al 40 por ciento.

No es la primera vez que esto sucede. El año pasado, las comunidades presentaron presupuestos que sumaban 1.367 millones de euros en ingresos por las desinversiones. A final de año, sólo habían conseguido 272 millones, algo menos del 20 por ciento de lo previsto.

Pese al incumplimiento del año pasado, las autonomías se han lanzado a anunciar millones de euros de ingresos mediante la venta de activos con un resultado similar al de 2012.

Baleares, Madrid y Cataluña, ejemplos del fracaso

Baleares, Cataluña y Madrid, tres de las comunidades que más esperanzas habían puesto en la venta de sus inmuebles para hacer caja, no han conseguido ni de lejos sus objetivos. La primera ha logrado sólo dos de los 11 millones previstos, mientras que la Generalitat sigue buscando comprador para sus joyas inmobiliarias. Madrid, que pensaba obtener más de 30 millones de euros, parece haber frenado el plan ante el desinterés que concitó la subasta.

De esta forma, si las autonomías siguen sin conseguir ejecutar sus planes de venta de activos, tendrán que buscar cómo compensar los 2.500 millones de desviación de ingresos que llevan hasta la mitad de año. Las alternativas son escasas: subir impuestos o recortar gastos.