Ningún parlamentario de Podemos y Ciudadanos ha solicitado la instalación de esta línea

El Congreso sigue pagando el ADSL de 77 diputados en sus casas

Un total de 77 miembros del Congreso de los Diputados han solicitado la instalación de la línea de ADSL en su domicilio en la modalidad de pago compartido


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Un total de 77 miembros del Congreso de los Diputados han solicitado la instalación de la línea de abonado digital asimétrica (ADSL) -acrónimo del inglés Asymmetric Digital Subscriber Line- en su domicilio en la modalidad de pago compartido, por la que la Cámara paga parte de la factura. Según la información remitida por el Congreso a Sueldos Públicos, a fecha de 5 de septiembre de 2016, son 273 los parlamentarios de la XII Legislatura que no han pedido esta línea.


Entre los que sí lo han solicitado están 44 diputados del Partido Popular y 29 del Grupo Socialista. Además de ellos, también lo ha pedido uno de los miembros de Esquerra Republicana de Catalunya, dos del Partido Nacionalista Vasco y otro del Grupo Mixto. En la respuesta que nos ha remitido el Congreso no aparecen los nombres de los parlamentarios que han pedido la instalación del ADSL porque “suministrar información individualizada supondría facilitar datos de carácter personal”.


vista Congreso Diputados Sueldos Públicos


Por su parte, ninguno de los 71 diputados del grupo Podemos-En Comú Podem- En Marea ni de Ciudadanos ha solicitado este ADSL. Tampoco lo han hecho 93 parlamentarios populares, 56 socialistas, 8 de ERC, 3 del PNV y 10 del Grupo Mixto.


Menos diputados que la pasada legislatura

Según los datos que la propia Cámara envió a este portal la pasada legislatura, son 12 parlamentarios menos los que han solicitado esta instalación ya que en la XI Legislatura fueron 261 los que renunciaron y 89 los que pidieron su ADSL.


Además de tener derecho a que el Congreso sufrague parte de la línea de ADSL, los diputados reciben al inicio de la legislatura un kit tecnológico compuesto por un teléfono y una tableta de última generación. Cuando finaliza su mandato, el Congreso les ofrece quedárselo a cambio de pagar su valor residual.